Detuvieron a un hombre acusado de asesinar a un bibliotecario correntino

Estuvo dos meses prófugo de la Justicia. Tenía pedido de captura nacional e internacional. El hombre de 25 años sería el autor material del asesinato del profesor santotomeño. Lo atraparon en Misiones y ya fue trasladado a Corrientes.

E. I. Rodríguez, de 25 años, tenía pedido de captura por estar vinculado al crimen de quien fuera en vida Julio Espíndola, hecho ocurrido en la localidad correntina de Santo Tomé el 11 de abril último. Investigan robo seguido de muerte.

Funcionarios de la Policía de Oberá, Misiones, realizaron tareas investigativas en distintos lugares de esa ciudad como en el ámbito de la provincia, ya que se contaba con datos certeros de que Rodríguez se desplazaba en distintas colonias.

Fue así que cerca de las 16, agentes de la Brigada de Investigación pudieron detectar por calle Formosa la presencia del hombre, de manera que fue detenido e identificado. Luego quedó a disposición del juez en turno de esa ciudad, quien ordenó se le notifique de la aprehensión y fue trasladado a la Unidad Regional de Oberá.

Ayer, finalmente fue llevado a la comisaría de Santo Tomé para continuar con los trámites del caso. En tanto su madre dijo a la prensa local que su hijo es inocente.

Rodríguez es el segundo capturado vinculado al crimen del profesor y bibliotecario correntino, ya que desde un primer momento fue detenido C. J. Melgar.

Tal como se informó en este matutino en la oportunidad, Julio Jesús Espíndola, de 52 años, murió como consecuencia de una serie de golpes en el cráneo.

El crimen habría ocurrido el domingo 9 de abril a la noche, pero el delito fue descubierto el martes 11 a la mañana. Ese día hallaron al hombre tirado en el piso de su domicilio situado en el barrio Federal.

La ausencia en su puesto de trabajo llamó la atención en personas de su entorno y una de ellas, al ir hasta su casa a buscarlo porque temía algo malo, descubrió una escena horrenda.

Una compañera de trabajo llamada Marcela fue quien llegó hasta el domicilio y de acuerdo a lo que notificó después a la Policía ingresó a la propiedad por un portón lateral que da al patio interior.

Notó que la puerta de atrás estaba abierta y decidió entrar.

En el comedor observó las primeras manchas de sangre. Al llegar al pasillo que da al baño halló el cuerpo de Espíndola ensangrentado.

El olor nauseabundo fue signo inequívoco de que hacía varios días que estaba muerto. Como pudo, la mujer salió hasta la vereda y dio aviso a la Policía.

Minutos más tarde comenzó la investigación de un crimen que conmocionó a la comunidad de Santo Tomé y que tiene a dos hombres imputados: C. J. Melgar de 57 años y E. I. Rodríguez de 25, quien fue detenido el último sábado por personal de la Unidad Regional II en Oberá tras meses prófugo.

En el diario misionero El Territorio brindaron detalles del expediente que se tramita ante el Juzgado de Garantías de Santo Tomé, en el que consta el cúmulo de pruebas sobre ambos acusados del homicidio que habría sido perpetrado en ocasión de un robo.

«El cadáver se hallaba en el baño, acostado boca arriba, sin remera, con short y descalzo. Hallaron sangre en el piso, paredes, espejo y puerta, se detalla en la causa», indicaron.

El médico policial en turno constató que «a la primera inspección se aprecia varios golpes con objeto contundente en cráneo región parietal, occipital, temporal y frontal, heridas cortantes en rostro, de menor importancia, en lo que respecta a causales de muerte. No se evidencian lesiones de defensa», consta en expediente.

Entre las primeras declaraciones, otra amiga de la víctima refirió que la última vez que estuvo con él fue el día viernes 7 de abril al mediodía, ocasión en la que Espíndola le comentó que estaba viviendo con un misionero que un conocido suyo le pidió que alojara por unos días.

Ese conocido tenía un local en la terminal de ómnibus. La amiga dijo que la víctima tenia una moto Honda Wave S 110 roja que no estaba en la casa.

Un paso importante en la investigación fue el hallazgo de la moto en el estacionamiento de la terminal, tras lo cual se revisaron los registros de las cámaras de seguridad del predio.

Así, dieron con una secuencia fílmica en la que se descubrió a los posibles autores escapando en una camioneta blanca.

Inocente

Liliana, madre del capturado Rodríguez, hizo declaraciones públicas en las que aseguró que su hijo ni siquiera sabía que el hombre (Espíndola) falleció. Negó que su hijo tuviera alguna relación sentimental con el santotomeño asesinado -como trascendió- y aclaró que fue solo dos semanas a la casa de Espíndola a acompañar a su conocido Melgar. «Él se entregó. La Policía ni lo buscó», dijo Liliana. «Mi hijo fue a la casa del profesor, donde pagó por un alquiler esos días. El tipo (por el fallecido) le espiaba cuando se bañaba y a la tercera vez me contó que pelearon porque él no es así», dijo la mujer.

«Creo en la inocencia de mi hijo. No sé qué pasó ahí. La Justicia tiene que ser justa, pero espero que no le pegue la Policía», agregó Liliana ante el canal de noticias Alem.news.

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Actualizada: 21 de junio de 2023 — 10:03