En Loreto, Kiszka estuvo escondido en un predio municipal y hasta participó en el festejo por el día del niño

La reconstrucción de los días de fuga del ex diputado provincial Germán Kiszka en la localidad correntina de Loreto, son escabrosos. Según el testimonio de los habitantes del pequeño poblado, el prófugo imputado por pedofilia, caminaba tranquilo por la comuna y hasta estuvo en los festejos centrales por el día del Niño en la plaza principal de Loreto. A pesar de que no había cambiado su aspecto nadie advirtió quién era, solamente una señora que hablaba con él pero que, al no tener electricidad en su casa desconocía la identidad del ahora detenido ex legislador misionero.

El principal mandamiento de un prófugo es pasar desapercibido. ¿Pero en un pequeño poblado donde todos se conocen? Germán Kiszka logró hacerlo durante una semana y a pesar de no haber cambiado su aspecto físico. Tenía la misma barba, el mismo color de cabello y hasta la misma vestimenta con la que aparecía en las fotos de buscado por la Justicia Nacional e Internacional tras los pedidos de captura por parte de un juez de la provincia de Misiones con asiento en Apóstoles.

 

 

 

El ex legislador de Misiones está imputado de consumir y distribuir material pedófilo junto a su hermano Sebastián y se los investiga además si son parte de una red internacional que lucra con ese delito.

 

 

 

Desde el pasado miércoles 21 de agosto el juez Penal N° 4, Miguel Faria pidió el arresto de los hermanos Kiszka. Así, Germán se subió al Toyota Corolla a nombre de su padre y viajó desde Apóstoles (Misiones) hasta el camping municipal de Loreto, Corrientes. Unos 200 kilómetros sin que ningún control de las policías misionera, correntina o de Gendarmería lo detenga.

Pasó una semana en la pequeña localidad correntina. Logró que en el camping administrado por el municipio local le hagan un lugar a pesar de que está en plena refacción, ahora la Justicia investiga a un empleado que le facilitaba un teléfono móvil para hablar. No se sabe si ese trabajador, como gran parte de los pobladores loretanos incluida la dotación de policías provinciales locales, no lo reconoció.

 

 

 

Germán Kiszka logró mimetizarse con el poblado y caminaba a diario por el balneario comunal que está en el mismo predio del camping donde se escondió y hasta participó de los festejos por el día del niño realizado el pasado domingo 25 de agosto en la plaza (25 de mayo) principal de Loreto.

 

 

 

Mientras era buscado en todo el país y países limítrofes el ex legislador misionera generó un vínculo vecinal con Julia, una señora que vive cerca del camping donde día de por medio iba a cargar su teléfono celular. La mujer no tiene electricidad en su vivienda. Hasta que el pasado miércoles 28 de agosto de visita en la casa de una pariente vio en la televisión el rostro de “Germán” y asustada exclamó: “Ése es el del camping”.

 

 

 

Llamó a la comisaría local. Los policías provinciales fueron a su casa, le tomaron los datos dados y llegaron hasta el camping donde comprobaron que el hombre más buscado del país estaba en ese lugar desde hacía una semana.

 

 

 

La tierra del chamamé además de payé también tiene sorpresas. Ahora los concejales de la oposición al actual intendente loretano quieren saber si todo fue un engaño del ex prófugo o hay algo más.

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Actualizada: 30 de agosto de 2024 — 10:29