La víctima tenía en su poder la réplica de un arma y estaba con un cómplice, que se dio a la fuga.
Un presunto «motochorro» de 16 años fue asesinado de un disparo en el cara cuando aparentemente intentaba asaltar, junto a un cómplice, a un policía que se encontraba vestido de civil en la localidad bonaerense de Luis Guillón. Debajo del cuerpo de la víctima encontraron la réplica de un arma.
Los efectivos de la comisaría 2da. llegaron este sábado a la escena del crimen, en el cruce de las calles Sardi y Almafuerte del sur del conurbano, tras un llamado al 911 que alertaba sobre un enfrentamiento armado.
En el lugar los investigadores pudieron entrevistarse con un hombre de 55 años, quien aseguró que unos momentos antes habían tratado de asaltarlo dos personas que circulaban en moto.
De acuerdo a su testimonio, al que accedió y difundió Télam, uno de los ladrones se bajó de la moto y amenazó con un revólver a la víctima, que se identificó entonces como policía, sacó su arma reglamentaria y disparó dos veces.
Uno de los delincuentes logró escapar rápidamente del lugar mientras que su cómplice cayó herido a los pocos metros y murió poco después. Tenía una herida de arma de fuego en la cara a la altura de la nariz y, debajo del cuerpo, tenía una pistola tipo replica de color plateada. En tanto, la víctima del intento de robo se encontraba ileso y los efectivos incautaron el arma reglamentaria y dos vainas servidas calibre 9 milímetros.
En la causa intervino la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 8 del Departamento Judicial de Lomas Zamora, quien solicitó la presencia de Médico de Policía y Policía científica para que realicen las pericias correspondientes.
Otro caso similar
En marzo, un motochorro de 19 años murió tras tirotearse con un gendarme al que había intentado robarle la moto junto a su cómplice. El otro delincuente, un joven de 20 años, resultó gravemente herido tras el enfrentamiento armado ocurrido en la localidad bonaerense de El Jagüel, municipio de Esteban Echeverría.
El hecho ocurrió en la esquina de Entre Ríos y Miguel Ángel. Un sargento ayudante de la Gendarmería Nacional Argentina (GNA), que trabajaba como chofer en el municipio de Ezeiza, fue sorprendido por dos jóvenes que se movilizaban en una moto sin patente y, al ser amenazado a punta de pistola, sacó su arma reglamentaria y respondió.
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